La Universidad vespertina fue el lugar
propicio para reunir a tres mujeres, con realidades muy diferentes, a compartir
sus vidas en el plano sentimental y sexual. De esas conversaciones camino a la
estación de metro, luego de un largo día entre trabajo y estudio, surge la idea
de compartir sus experiencias con otros. Pensaron en que, en el mundo ajetreado
en que vivimos, es bueno darse una pausa para analizar nuestras vidas; darle la
importancia que se merece a nuestra sexualidad, concluyendo que: “el sexo da vida, mantiene el amor en llamas
y se convierte así, en un pilar fundamental en nuestras relaciones de pareja”.
Un pilar en que ambos deben participar, pero que siempre es uno, quien toma la
iniciativa.
Pero ustedes se pueden preguntar
¿qué tan diferentes pueden ser tres mujeres que comparten una misma carrera? Pues
bien, lo suficiente como para aprender, las unas de las otras, de sus experiencias.
Y es justamente eso, lo que queremos compartir con ustedes.
Ingrid, es madre y esposa, a sus
40 años se siente de maravilla, ha decidido entrar a la universidad, un sueño
que tenía postergado. Ella dice que hay ciertas reglas internas que ayudan a
mantener la libido a pesar de los años de matrimonio, el quehacer del hogar y
los hijos; además, tiene firmes posturas acerca de la infidelidad.
Andrea, está cerca a los 30 años, número con el cual
no logra familiarizarse aún. Cansada de ser técnico, decidió, por fin, concretar
una carrera universitaria. Ella está experimentando la vida en pareja. Desde
hace poco más de un año, cambió la libertad absoluta que le daba su condición
de mujer soltera e independiente, para probar suerte con la estabilidad familiar
y la monogamia, algo a lo cual temía, pero que le ha brindado grandes
satisfacciones, en todos los aspectos.
Por último Cynthia, la más joven
de las tres, con sus 21 años se declara una enamorada de la vida, de la música,
algunos vicios y también de las mujeres. Dice que los hombres no le dan
seguridad. Trabaja de día y estudia de noche, pero a diferencia de Andrea e
Ingrid, ella en sus tiempos libres goza de los excesos, se enamora y se desenamora,
vive su juventud a concho; a pesar de eso, tiene visiones y posturas claras de
su vida.
Estas tres guapas mujeres,
pretenden entregar información -datos curiosos y algunas recomendaciones- desde
sus experiencias particulares, sobre cómo disfrutar de la sexualidad; del amor en
pareja; y sobre todo, de cómo no dejarnos olvidadas en el baúl de los
recuerdos.
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